Los manglares son reconocidos como los ecosistemas más diversos e importantes del planeta no solo por su biodiversidad sino también por los servicios que proporciona a las personas. En este sentido, docentes y los estudiantes de Biología de la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL), como parte de sus prácticas preprofesionales, trabajan para fortalecer el conocimiento de las asociaciones (Custodiaros) del manglar en el Archipiélago de Jambelí, provincia de El Oro.

Como parte de sus acuerdos con el Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE), las asociaciones (Custodiaros) mantienen un Acuerdo de Uso Sustentable y Custodia del Ecosistema Manglar (AUSCEM), siendo uno de los requisitos para la entrega del área contar con un convenio de asistencia técnica, a través del cual una universidad, ONG u empresa. En este caso, la UTPL cumple con este rol.

Por medio de talleres y técnicas participativas, la UTPL busca fomentar el uso sustentable de los recursos bioacuáticos, reforestación de zonas de manglar, gestión de residuos sólidos y análisis microbiológicos de recursos como las conchas, con el fin de garantizar o mejorar la calidad de los recursos y la salud alimentaria de la comunidad.

Carlos Naranjo Franco, docente de la carrera de Biología, destaca que la universidad viene ejecutando este proyecto desde hace varios años en conjunto con dos asociaciones pesqueras de la Isla Bellavista y la Isla Costa Rica, quienes tienen a su cargo el cuidado de este importante y sensible ecosistema.

“Los manglares enfrentan diversas amenazas, debido a factores como la erosión y la producción camaronera. Esta iniciativa permite que los estudiantes de la UTPL se vinculen con problemáticas reales y contribuyan al desarrollo de estrategias de manejo y conservación de este ecosistema en beneficio de la colectividad”, explica Naranjo.

El catedrático señala que esta iniciativa beneficia a cerca de 1.000 habitantes de la localidad y permite el uso sostenible de alrededor de 1.000 hectáreas de manglar. Entre las estrategias implementadas, se registra la puesta en marcha de medidas como la auto-veda de ciertas especies (concha prieta y cangrejo rojo) por determinados períodos de tiempo, para garantizar que exista equilibrio en las poblaciones de las especies y este ecosistema.

Además, se ha trabajado en la creación de laboratorios de larvas artesanales in situ, para la producción de larvas de concha, que contribuyan a la economía de las comunidades que subsisten de la pesca de estas especies. También se trabaja en la reducción de la contaminación por plástico en los manglares y en iniciativas para contribuir a la reforestación de estas áreas custodiadas, todas estas acciones acompañadas del proceso investigativo correspondiente tratando de integrar la academia y la sociedad con un objetivo en común; la conservación del Manglar y sus recursos.