La inclusión en la educación superior es esencial para la equidad. Las instituciones que priorizan la diversidad y la inclusión crean espacios donde cada estudiante se siente valorado. En este contexto, la UTPL, a través de la Dirección de Planificación y Desarrollo del Currículum del Vicerrectorado Académico, promueve el proyecto Compañero Par. Esta acción brinda a los estudiantes con necesidades educativas especiales (NEE), asociadas o no a discapacidad, acompañamiento académico y administrativo por parte de un compañero, junto a los directores de carrera y docentes de la universidad, durante su formación académica.
Este acompañamiento se efectúa a través de tutorías con el fin de intervenir oportunamente en caso de que alguno presente inconvenientes en su proceso de aprendizaje.
Carolina Espinosa Maldonado, analista de inclusión del Vicerrectorado Académico de la UTPL, comenta que el proyecto Compañero Par inició en el 2019 para brindar acompañamiento a los estudiantes con necesidades educativas específicas asociadas o no a discapacidad.
“Contamos, en promedio, con 10 o 12 participantes por periodo académico, cada uno con su respectivo compañero par, quienes han brindado apoyo a sus compañeros en el refuerzo de contenidos y con retroalimentación en temáticas complejas, así como en procesos administrativos”, señala Espinosa.
Por otra parte, José Ivo Contreras, director de la carrera de Enfermería de la UTPL, agrega que el principal objetivo de esta iniciativa es “transformar al Compañero Par en un amigo muy cercano, en un apoyo sustantivo para sobrellevar los desafíos del mundo académico”. Además, manifiesta que este proyecto permite involucrar a estudiantes en el desarrollo de propuestas que tienen un alto impacto en la sociedad y les permiten fortalecer su perfil como agentes de cambio.
Ambos funcionarios señalan que la universidad ha implementado herramientas informáticas y cambios estructurales pensando en los estudiantes con NEE asociados o no a discapacidad; entre ellos, el uso de lenguaje Braille (impresora braille, software Jaws y señalética braille en todo el campus universitario) y el Entorno Virtual de Aprendizaje (EVA), accesible mediante la herramienta ReadSpeaker que facilita el aprendizaje de todos los estudiantes.
El impacto que ha tenido esta iniciativa es digno de resaltar. A nivel académico, ha permitido conocer nuevas formas de relacionarse adecuadamente con estudiantes del grupo de atención prioritario. Los beneficiarios de esta iniciativa comentan sentirse contentos e incluidos por la universidad y sus compañeros, tal es el caso de Karla Sarango, estudiante de la carrera de Enfermería de cuarto ciclo, quien presenta una necesidad educativa asociada a dificultades en el proceso de aprendizaje.
“Estoy desde primer ciclo en el proyecto Compañero Par y ha sido de gran ayuda para mi proceso de aprendizaje. Hay algunos temas que no entiendo y mi compañero siempre encuentra la manera de explicarme lo que no comprendo”, dice Sarango y resume en dos palabras cómo ha sido la convivencia con su compañero par: empatía y compañerismo. “Es una amistad afianzada”, agrega.
Algo importante que señala Sarango es que no solo la persona con necesidad educativa especial aprende en este proceso, también lo hace el compañero par, desde el punto de vista de la convivencia y el refuerzo de sus conocimientos. La estudiante motiva a la universidad a seguir con estas iniciativas y metodologías que benefician a la comunidad universitaria.
Con relación al proceso para participar, los estudiantes que desean realizar acompañamiento o necesitan el apoyo de otro estudiante pueden contactarse con Carolina Espinosa Maldonado (mcespinosa5@utpl.edu.ec) para acceder a más información. Uno de los beneficios de esta iniciativa es que le permite a cada compañero par acceder a una beca.
A través de este tipo de proyectos, la universidad se posiciona como una institución inclusiva, innovadora y de calidad. Además, reafirma su compromiso con los Grupos de Atención Prioritaria. Conoce más en servicios.utpl.edu.ec/companeropar
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