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Cada 21 de marzo, el mundo celebra el Día Internacional de los Bosques, una iniciativa de la ONU que invita a reflexionar sobre la importancia de estos ecosistemas para la vida en el planeta. Al día siguiente, el 22 de marzo, se conmemora el Día Mundial del Agua, otra fecha clave de concientización sobre la conservación de este recurso esencial para la supervivencia humana y el equilibrio de la naturaleza. La conservación de ambos enfrenta serias amenazas y en Loja, los incendios forestales han sido uno de los fenómenos más devastadores en los últimos meses.
Según la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, hasta noviembre de 2024, los incendios forestales arrasaron más de 79.000 hectáreas de cobertura vegetal en Ecuador, más del doble de lo quemado en el mismo periodo de 2023. De las 22 provincias afectadas, Loja fue una de las más golpeadas, con miles de hectáreas consumidas por el fuego.
Esta devastación no solo ha alterado la biodiversidad local, sino que ha interrumpido los ciclos hídricos que son esenciales para la región. La desaparición de los bosques, especialmente en áreas de páramo y humedales, pone en riesgo la disponibilidad de agua, un recurso ya escaso en muchas zonas del Ecuador.
Para comprender la magnitud del problema y las posibles soluciones, Ángel Benítez Chavez, director de la carrera de Gestión Ambiental de la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL), explica las causas, consecuencias y estrategias para la recuperación de estos ecosistemas.
Según Benítez, los incendios forestales están estrechamente relacionados con el impacto del ser humano en los ecosistemas.
"Estamos en la era del antropoceno, donde el cambio global y climático ha modificado las condiciones ambientales, y ha afectado tanto a ecosistemas naturales como antrópicos. En Loja, la problemática radica principalmente en el cambio de uso de suelo, donde los bosques naturales son reemplazados por sistemas agrícolas, pastizales o zonas urbanas en expansión", argumentó.
Entre las principales afectaciones, el académico destacó la pérdida de cobertura vegetal en bosques naturales y matorrales.
"A simple vista, vemos la desaparición de árboles y vegetación, pero lo que no se percibe de inmediato es la alteración de las interacciones ecológicas. Los incendios afectan la biodiversidad, los microorganismos del suelo y el equilibrio de los ecosistemas, lo que reduce su capacidad para proveer servicios ambientales esenciales, como la regulación del agua y la captación de carbono", enfatizó.
La UTPL ha desarrollado varios proyectos de investigación sobre restauración ecológica y prevención de incendios. Uno de estos estudios, realizado en el ecosistema de páramo, analiza la recuperación de la vegetación tras incendios mediante experimentos de quemas prescritas bajo lineamientos técnicos y científicos.
Asimismo, la universidad colabora con la Universidad Nacional de Loja (UNL) en un proyecto para evaluar el impacto del fuego en la biodiversidad de diferentes ecosistemas, como el matorral, el páramo y los bosques. Además, la universidad ha capacitado a bomberos en el uso de sistemas de información geográfica para identificar áreas vulnerables a incendios y fortalecer la respuesta ante emergencias.
"Comprender cómo los incendios afectan a cada ecosistema nos permitirá diseñar estrategias de restauración efectivas y prevenir futuros desastres. La ecología del fuego es un campo en constante desarrollo y en Loja estamos trabajando para generar conocimiento aplicado que ayude a mitigar estos impactos", enfatizó.
La relación entre la conservación de los bosques y el agua es fundamental. "Las áreas de páramo conservado, sobre todo en zonas protegidas, nos permiten mantener una disponibilidad hídrica adecuada", señala Benítez. La restauración de estos ecosistemas es clave para garantizar el acceso al agua en el futuro. Además, el académico resalta que la participación de la sociedad, en conjunto con las autoridades locales y la academia, es crucial para alcanzar soluciones duraderas.
En estos días conmemorativos, la reflexión es clara: la crisis ambiental en Loja es un llamado de atención sobre la urgencia de proteger y restaurar los bosques. El futuro de estos ecosistemas depende de la acción conjunta de autoridades, academia y ciudadanía.