Las condiciones económicas, sociales, políticas y culturales de todo lo que nos rodea han sido potenciadas por la intervención del trabajo femenino, factor que ha contribuido a lograr una ciudadanía más integral en el fortalecimiento de la gobernabilidad democrática. Por consiguiente es necesario que problemas como la pobreza, la inequidad de género en cuanto a educación, oportunidades de empleo y trabajo productivo dejen de afectar principalmente en las mujeres.

“Mujeres del año” es una iniciativa originada por la Revista Hogar con el objetivo de reconocer la invaluable labor de mujeres que labran nuevos caminos hacia la generación de estrategias que afecten positivamente las condiciones de la sociedad.

Como cada año, el pasado miércoles 9 de enero, tuvo lugar el evento que reconoce a destacadas figuras del país. Esta vez fueron 10 mujeres las homenajeadas por su trayectoria, trabajo, compromiso y el legado que sus acciones han dejado a la ciudad y el país en el campo social, cultural, deportivo, empresarial, científico y académico del Ecuador durante el 2018.

Entre las galardonadas se distingue Silvia González, docente del Departamento de Química y Ciencias Exactas de la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL), quien fue reconocida en mérito a su brillante desempeño dentro de la química cuántica, destacándose en el ámbito científico del país.

El mundo de la ciencia y todo lo que de ello deriva en beneficio de la humanidad, ha sido una de las grandes pasiones que ha movido la trayectoria profesional de Silvia González Pérez, doctora en Química Cuántica y Métodos Computacionales.

Al recibir el reconocimiento Silvia González resaltó el hecho de ser misionera Idente y agradeció al Instituto Id de Cristo Redentor, Misioneras y Misioneros Identes por haberle confiado una gran misión que puede hacer realidad en las aulas de la UTPL.

La científica considera que el trabajo en equipo es sumamente importante para el progreso colectivo y que la búsqueda del conocimiento tiene sentido porque nos aproxima a la verdad. Durante su intervención en el evento, González manifestó estar comprometida con mejorar la vida de su comunidad local y nacional, mientras que a los jóvenes científicos que son sus estudiantes, aseguró inculcarles el rol de liderazgo, asesoramiento y mentorización.

Una científica con espíritu idente

Silvia González nació en Ecatepec, México, sin embargo reside en Loja, Ecuador por más de una década.

La carrera profesional de la científica ha transcurrido en la enseñanza superior de química y física y, actualmente centra su investigación en catálisis y modelado molecular de nuevas sustancias potenciales que pueden ser sintetizadas o purificadas a través de productos naturales. Además, su aporte al conocimiento científico, se ve reflejado a través del Grupo Ecuatoriano para el Estudio Experimental y Teórico de Nano Sistemas (Red GETNano), del cual es cofundadora; actualmente es docente del departamento de Química y Ciencias Exactas y Directora General de Misiones Universitarias de la Universidad Técnica Particular de Loja.

Silvia descubrió su vocación mientras estudiaba el doctorado de Química Teórica y Computacional en la Universidad de Barcelona, España, lugar en el que conoció a las Misioneras Identes, descubriendo así a Dios como la persona a quien poder dirigir sus esfuerzos y a Jesús como el auténtico maestro en la construcción del Reino de los Cielos.

Es importante señalar que en 2018, la docente investigadora obtuvo el premio internacional de la Fundación Elsevier por su aporte científico en química teórica y computacional, donde se sumó al grupo de cinco científicas destacadas de diversos países que fueron reconocidas por la Organización para las Mujeres en la Ciencia para el Mundo en Desarrollo. Lee más sobre este acontecimiento en la nota: Docente UTPL entre las mejores 5 mujeres científicas de países en desarrollo.

Su destacada trayectoria e incesante trabajo la posicionan como una de las grandes mentes del país, por lo que busca motivar a las mujeres a que participen en el ámbito científico, por su especial visión y sensibilidad.