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La educación permite reconocer cómo la tecnología ha ido ocupando espacios antes impensados: desde los primeros juegos en computador hasta las herramientas digitales que hoy organizan la jornada laboral. Ese recorrido invita a formular una pregunta que conecta generaciones: ¿cómo ha transformado la informática la manera de comprender el mundo y hacia dónde se dirige su desarrollo?
La informática, inicialmente vinculada al cálculo y la automatización, sostiene hoy actividades sociales, científicas y productivas. En el Día Mundial de la Informática, esta evolución adquiere relevancia al observar como instituciones como la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL) integran estos cambios en su modelo formativo y en proyectos orientados a necesidades tecnológicas y sociales. Desde una mirada global, la universidad articula formación, investigación y vinculación para aportar soluciones aplicadas en el territorio.
En este proceso, la UTPL revisa la trayectoria histórica de la informática y su tránsito hacia sistemas digitales avanzados.
Fernanda Soto Guerrero, directora de la carrera de Ciencias de la Computación, destaca que la disciplina ha experimentado una expansión marcada por tecnologías emergentes y la necesidad de emplearlas de manera responsable. Señala que la informática “ha ido transformando y evolucionando hasta lo que hoy se reconoce como una transformación digital impulsada por tecnologías como la inteligencia artificial, la ciencia de datos y la ciberseguridad, en un escenario que exige que todo este desarrollo sea sostenible y avance de la mano con una tecnología orientada al bien común”.

El acceso masivo al internet aceleró la innovación y transformó la enseñanza. En respuesta, la universidad ajusta sus planes de estudio incorporando contenidos de inteligencia artificial, análisis de datos y seguridad digital, y mantiene diálogo con sectores productivos para identificar competencias emergentes. Este enfoque permite orientar a los estudiantes hacia perfiles adecuados para entornos laborales cada vez más especializados y colaborativos.
Uno de los cambios más significativos es el aumento de la participación femenina en áreas tecnológicas. La universidad impulsa actividades de motivación y orientación dirigidas a niñas y adolescentes para fomentar su interés por las áreas STEM. Estas acciones, según Soto, buscan que las jóvenes reconozcan su presencia en un campo históricamente masculinizado y se proyecten hacia carreras tecnológicas con mayor seguridad y perspectiva de futuro.
Paralelamente, la UTPL sostiene proyectos que vinculan aprendizaje y práctica. Destacan los programas de mentoría impulsados con aliados internacionales y espacios como Mindtech, donde estudiantes presentan desarrollos académicos y dialogan con actores institucionales y empresariales. Estos escenarios fortalecen la capacidad analítica de los estudiantes y permiten que sus propuestas encuentren aplicaciones reales.
Pensar en el futuro de la informática implica observar áreas como la computación cuántica, la computación ubicua y el desarrollo de soluciones multimodales. Estos desafíos requieren investigación, infraestructura y cooperación global. La UTPL orienta sus esfuerzos hacia la actualización continua de las mallas curriculares y la consolidación de alianzas que permitan a los estudiantes integrarse en ecosistemas de innovación.

El Día Mundial de la Informática también invita a los jóvenes a visualizar en este campo una oportunidad de aporte social.
Soto plantea un llamado a quienes inician su formación: “Les invito a ser parte de la construcción de un desarrollo sostenible que el país necesita, revisando cómo integrar las tecnologías emergentes para abrir caminos profesionales con coherencia y propósito”. Su reflexión articula visión de futuro, responsabilidad y compromiso con el entorno.
La experiencia de la UTPL evidencia cómo una institución puede acompañar la evolución tecnológica desde un enfoque inclusivo, actualizado y orientado al impacto, reafirmando el papel de la informática como motor de transformación social y educativa.



